Durante el invierno, desde el Departamento Técnico de Trecoop, efectuamos análisis de suelo de las fincas de nuestros socios. Los meses de noviembre y diciembre son los más adecuados para hacer estas analíticas, ya que han pasado un mínimo de 3 semanas desde que se hicieron posibles aplicaciones de fertilizantes en post cosecha en algunas de las fincas, y la aplicación para la siguiente campaña no se iniciará hasta enero del año siguiente.
Para la toma de muestras utilizamos una barrena tipo Edelman, como se muestra en la foto de cabecera, y tomamos un número indeterminado de submuestras de cada finca, que variará según el tamaño y homogeneidad de la parcela. Estas submuestras, tomadas en zigzag, conforman la muestra final.
Las muestras que se toman son superficiales, es decir, hasta unos 30 cm de profundidad. En el caso de riego a manta, las muestras se toman a una distancia de entre 25 y 75 cm del tronco del árbol, mientras que en fincas con fertirrigación, se cogen de la zona del bulbo húmedo.
Estas muestras se envían a nuestro laboratorio de referencia, pasan por un proceso de secado y tamizado y, en la posterior valoración, obtenemos datos sobre parámetros como textura, pH del suelo, conductividad eléctrica, contenido de materia orgánica, carbonatos, nitratos, fósforo, potasio y algunos microelementos.
Cuando se pone en marcha una plantación, recomendamos hacer analítica de suelo previa y, con posterioridad, se recomienda repetir el análisis cada 5 años, si es posible.
Con la información que nos aportan las analíticas de suelos, junto con otros datos, los técnicos hacemos una propuesta de abonado para la finca en cuestión, utilizando un tipo u otro de abonos minerales u orgánicos, y reajustando, si es necesario, las cantidades durante la primavera, según la previsión de cosecha que se estime.
Bibliografía:
Guía deinterpretación de análisis de suelos y plantas
Pere Villar Mir y Miquel Aran Mayoral
Xavi Escario y Carmen Colom
Dep. Técnico Trecoop Fruites